Si has decidido invertir en una cinta de correr para el hogar ¡felicidades! has tomado una excelente decisión para tu salud y tu vida en general. Ahora debes tener en cuenta que este tipo de máquinas sufren mucho desgaste, dependiendo de su tipo de uso; y la atención que prestes a su mantenimiento puede hacer la diferencia en la cantidad de años que ella te acompañe. Un buen trato también te ayudará a extraer el máximo rendimiento.
El primer punto que debes tener en cuenta es la limpieza del dispositivo, el polvo puede complicarlo todo, desgastar la base y la banda de carrera. Lo recomendable es que una vez por semana le pases un paño húmedo por toda la superficie; y una vez al mes realices una limpieza profunda para evitar que la tierra entre en el motor. Guíate por el manual de instrucciones para hacer el trabajo correctamente.
Si tu cinta de correr no cuenta con la función de auto lubricación es muy importante que te encargues regularmente de esta tarea. La grasa o aceite, dependiendo de tu dispositivo, es fundamental para que la banda de carrera circule con fluidez, en los casos donde comienza a frenar o a realizar ruidos extraños puede comprometer gravemente el motor. La falta de lubricación es una de las principales causas de deterioro prematuro.
Para un estado óptimo de funcionamiento es necesario que la banda rotativa sobre la que se realiza la carrera esté alineada correctamente; muchas veces ocurre que este cinturón se tuerza y debas enderezarlo. En la mayoría de las máquinas vienen unos pernos en los laterales posteriores que al moverlos puedes darles la posición correcta, este procedimiento también se incluye en el manual del usuario.
Es muy importante, sobre todo en verano con los intensos calores, revisar la temperatura del motor de tu cinta de correr. No es recomendable que superen los 50°, ya que esto podría ocasionar que el motor se queme. La forma más fácil de comprobarlo es poder colocar la mano sobre la tapa donde se encuentra el motor sin quemarte, si esto ocurre suspende el ejercicio rápidamente y dale un respiro al dispositivo.
Para que el ejercicio sea realizado adecuadamente es importante que se revise la tensión de la banda que forma la superficie de carrera; cuando este se estira y afloja, causa que el sujeto se patine dañando el sistema de rotación. Es importante que al arreglarlo no exageres en la tensión de la banda ya que esto podría deteriorar los rodillos de transmisión.
Una cuestión que debes aceptar de antemano es que la banda de carrera es el lugar donde mayor desgaste sufre la máquina, y tarde o temprano, sin depender de la calidad de tu dispositivo, deberás cambiarla. Es recomendable que cada tres meses pases tu mano por el reverso de la cinta para verificar cuánto se ha desgastado, te darás cuenta por qué se siente áspera. Si cambias el cinturón a tiempo podrás disfrutar más tiempo de su uso.
Para realizar un mantenimiento continuo de tu cinta, y extraer al máximo sus beneficios, tienes que realizar correctamente el ejercicio. Es recomendable iniciar a una baja velocidad e ir aumentando paulatinamente en el tiempo. Otro punto a tener en cuenta es que si la máquina está destinada exclusivamente para correr, no camines; esto daña el sistema de rotación y causa un esfuerzo innecesario del motor.
Estos consejos que hemos repasado son los pilares para tener un óptimo aprovechamiento de tu cinta de correr hogareña. Un último detalle a tener en cuenta es que si aumenta la velocidad con la que realizas tu carrera, el motor de tu dispositivo se conservará mejor y sufrirá menor desgastes ; así que ya sabes que el entrenamiento dura y alarga la vida de tu cinta.
Después de más de 9 años como instructor de fitness en gimnasios, en donde solucionaba cientos de dudas sobre las máquinas de cardio, me dio de forma casual por hacer esta web que lees. Si tienes cualquier duda, déjame un comentario y te responderé en cuanto me sea posible.
Saludos!
Pedro Ramirez Tapias
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